lunes, 11 de julio de 2016

Conociendo el Cerro Colorado

Después de muchos años pude conocer el Cerro Colorado.
La Reserva natural e histórica que se encuentra al norte de la Provincia de Còrdoba.
La última crecida del rìo se llevò el puente y ahora hay un desvìo sobre tierra para seguir hacia la localidad de Cerro Colorado
La localidad de Cerro Colorado cuenta con varios puntos de interès turìstico, entre ellos el museo arqueològico, la casa-museo del mùsico Atahualpa Yupanqui y los cerros: Colorado, Veladero e Inti Huasi que contienen màs de 30mil pictografìas de los comechingones y sanavirones.

Una de las pinturas rupestres

Mortero donde molìan los minerales para hacer las pinturas. Mezclaban los pigmentos con orina y lo dejaban fermentar.

En estas piedras estàn las pinturas y la gente sube, se toma fotos, pisa, toca...

Vista desde el Cerro

 La visita a la zona de las pinturas rupestres es sin costo y es guiada, sòlo a una ladera, las demàs estàn privatizadas (segùn lo que me dijeron ahì). Se hace caminando y tiene una duraciòn de no màs de 40 minutos.
Un hermoso arroyo atraviesa el pueblo, dónde hay banquitos para tomarse unos buenos mates y continuar con otros recorridos.
No cobran estacionamiento en ningùn lado y todos fueron muy amables con nosotros.
Otro atractivo frecuente es la casa que fuè habitada por el folclorista Atahualpa Yupanqui. Una casa que se encuentra bastante retirada en un lugar de ensueño. Rodeada de las montañas coloradas y el rìo, con un jardìn repleto de cactus y piedras con sus frases.
Rìo los Tàrtagos

zorzal

En la casa-museo de Atahualpa Yupanqui



Casa-museo de Atahualpa Yupanqui
La entrada a este museo tiene un valor de $30 por persona. Se puede entrar a la casa y conocer sus instrumentos y su dormitorio.
La noche caía silenciosa y fría, así que emprendimos el viaje de vuelta. Eso sí, en Colonia Caroya frenamos y nos comimos una rica picadita.

Ver màs fotos

martes, 24 de mayo de 2016

Fotolibro casero

Todas las mamás queremos guardar para siempre el recuerdo de la primer sonrisa, de sus manitos, de su pelito, de su primer comida, de su primer cumpleaños, si pudièramos guardar todo de alguna manera para detener ese instante del tiempo para siempre, sì, lo harìamos. Cada segundo de nuestro bebè es irrecuperable por eso es tan valioso para nosotras. 
Hay varias opciones o caminos. Lo màs comùn es tomarle 55 fotos al dìa con tu mòvil, usar la càmara de fotos familiar para los momentos especiales y/o contratar un fotògrafo para que lo haga a la perfecciòn.
Eligiendo la ùltima de las opciones, hay tres momentos claves en los cuales normalmente se toman sesiones fotogràficas a bebès. El primer momento es entre los primeros 15 dìas de nacidx, luego a los siete meses (cuando se siente) y al añito. El resultado de la sesiòn te quedarà en dvd, o fotos reveladas, o un fotolibro profesional.
Si vas revelando las fotos que le sacaste, seguramente estás llena de fotos sueltas de tu bebé guardadas en bolsas o en cajones, o en los lugares menos pensados.
Las fotos son para verlas. Por eso aquí te propongo una forma económica de crear tu propio fotolibro.
De esta manera también aplicaremos la regla de las 3R (reducir, reutilizar, reciclar).


Materiales:
1 Revista con tapa medianamente dura
Cinta scotch
Tijera
Cartulina
Stikers


Pasos:
Si la tapa no llega a ser lo suficientemente dura (firme) vamos a juntarla con dos o tres hojas de la revista y las pegamos con cinta alrededor. luego hacemos los mismo con las hojas unièndo de a tres hojas, para darles màs firmeza (podès hacerlo con plasticola).
Otra opciòn es forrar la tapa con alguna foto que imprimamos en papel grueso (màs de 170gr) y bien grande, que nos alcance para tapa y contratapa. Decòralo como te guste.
Cuando terminamos de pegar todas las hojas y tenemos lista la tapa, podemos empezar a ubicar las fotos y pegarlas. Asegúrate de que no quede aire entre las hojas sino se va a quedar todo inflado y no va a cerrar bien.
Està bueno que les des un òrden, sea cronològico o el que elijas.
Podès poner una dos o tres fotos por pàgina segùn el tamaño. Si querès podès dejar a la vista algùn diseño de la revista que te guste o tapar algún texto o marca con un stiker.
Finalmente cubrimos las tapas con folios transparentes para que duren màs o las forramos con la làmina transparente autoadhesiva. Podès hacerlo con cada hoja. Dejalo una semana abajo de otros libros pesados asì toma forma.



 Si querès un fotolibro màs artesanal, aquì te dejo el enlace para que lo hagas con tu propia encuadernaciòn.

 Podès agregarle cartitas, mensajitos, dibujos propios, poemas. Dejà en libertad tu creatividad. Despùes abuelos y tìos se derretiràn de ternura al ver el fotolibro de tu bebè.



lunes, 23 de mayo de 2016

maternidad

Bueno, pasó mucho tiempo desde mi último posteo... Sólo les cuento que fui mamá, 💕entre otras cosas hermosas que viví.
Sabrán entender lo que esto significa, una de esas no, pero no voy a escribir de esto por ahora.
😉